AMAZONAS: MITO O REALIDAD

Una máxima muy conocida nos advierte: La Historia la escriben siempre los vencedores, y en el caso que nos ocupa es una "verdad como un templo" recurriendo de nuevo a la sabiduría popular porque las leyendas sobre las míticas amazonas las escribieron hombres y en estas siempre son vencidas por un varón las más conocidas de estas aguerridas guerreras Pentesilea reina amazona célebre por su belleza muerta a manos de Aquiles, Hipólita  vencida por Heracles (Hércules en el mundo romano).
En la mitología popular son guerreras que viven en un mundo totalmente matriarcal, sin admitir en sus estados la presencia de varones, una vez al año, y con el fin de perpetuar su pueblo, visitaban los pueblos vecinos para un "matrimonio de visita" si el resultado de este encuentro era varón, según diversos autores podía ser abandonado, sacrificado o entregado a su padre, las niñas se quedaban con ellas a las que adiestraban en las labores del campo, de la caza y de la guerra.
Dada la cada vez más frecuente violencia de género, y el número de divorcios en aumento, es para plantearse si la visión de las amazonas no sería la correcta, aumentando el número de "visitas conyugales", quizás la pareja perfecta es aquella que no cohabita, evitando los roces y el desgaste de la convivencia.
A propósito de esta visión ya una autora Joanna Russ compartió esta idea en su libro "El Hombre Hembra" publicado en 1975, donde nos da una visión del mundo desde el punto de vista de cuatro mujeres en distintas épocas siendo la última una visión de un mundo muy lejano donde los hombres y mujeres viven separados luchando entre sí ( en esta época ya se había solventando el problema de la supervivencia de la especie gracias a la ciencia, se clonaban los embriones dando siempre como resultado una fémina).


Volviendo al inicio, todas las leyendas tienen un sustrato de verdad que se ha transmitido a lo largo de los siglos, en este caso las hipótesis, no muy aceptadas dentro de la ortodoxia, sería que el mito de las amazonas lo había suscitado las mujeres sármatas, pueblo que vivía en las estepas de Kazajistán, sur de Rusia y Ucrania (la antigua Escitia) y que se extendieron hasta las llanuras del Cáucaso. Bielorrusia y Polonia hasta el mar Báltica (la posterior Sarmacia), las evidencias arqueológicas parecen confirmar la existencia de guerreras participando en las operaciones militares ya que se han descubierto arcos en sus tumbas.
El hecho que participaran activamente en las luchas no es tan raro, dado que al ser unas tribus nómadas cazadoras, las mujeres debían saber defenderse a sí mismas y a su ganado cuando los hombres se ausentaban en busca de caza.
En vez de elogiar su valentía los autores clásicos se han empeñado en presentarlas como un adversario extranjero que amenazaba la masculinidad de sus héroes. A lo largo de la Historia y una vez el hombre se erigió con el poder frente al matriarcado de los primeros tiempos, siempre ha tenido miedo a una mujer libre con opinión y voluntad que disfruta y vive plenamente su sexualidad sin necesidad de gineceos, harenes o purdah en los que a menudo se ha visto recluida de una forma física y en normas, leyes, costumbres y educación de una forma psíquica.
Tal vez sería hora de reescribir las leyendas y que sean las amazonas quienes se impongan a estos dos héroes Aquiles y Hercules